“El invierno no es pasado, mientras Abril no ha terminado”.
Sin llamar. Casi de forma sorpresiva, la primavera se colaba por las rendijas de nuestras vidas. Sólo los mimosos en flor y la vuelta de las primeras golondrinas indicaban que el invierno se batía en retirada para dejar paso a un tiempo nuevo… Como compañía a este nuevo ciclo vital, allá por mediados de marzo, no tardaría en llegar el esplendor de los almendros, cerezos y manzanos vestidos con sus mejores galas.
PRIMAVERA [
por garciaberciano...]
La tristeza del largo invierno daba, por fin, sus últimos coletazos. Como todos los años, la estación fría se había hecho interminable: los días cargados de clases daban paso a unas noches carentes de atractivo alguno, si exceptuamos las escasas y, la mayor parte de las veces, ilegales escapadas a los soportales de La Plaza para echarse alguna partida de chapas, jugar al “burro”, “a la una anda la mula” o al “pañuelo”.
[+ en miradas3-retratos de una época]