La demanda de bioenergía multiplicará por cuatro la producción forestal
El despegue del consumo de energías renovables repercutirá directamente en el incremento de la producción de biomasa forestal, una de las posibilidades de aprovechamiento de la riqueza de los bosques leoneses, en cifras aún limitadas. Las dos menciones figuran en el listado de objetivos que mueve el congreso de Biomun, que se celebra durante tres días en León, y que persigue una definición exacta de la demanda y la producción de biomasa como fuente energética
La salida comercial de los productos que se obtienen sólo a partir de los tratamientos selvícolas permitiría multiplicar por cuatro el uso actual que se obtiene de los montes leoneses en este ámbito. De los 1,5 millones de metros cúbicos de madera que generan cada año los bosques de León, sólo se aprovecha en torno al 20%, alrededor de 300.000.
El presidente de la asociación española de valorización energética de valorización de biomasa, Avebiom, que organiza el congreso junto a Cesefor, resumió así el propósito final del evento: «Convencer a los responsables municipales que el uso de la bioenergía alternativa es la alternativa al petróleo y difundir que esta modalidad el 25% más barata que la que procede de fósiles», dijo Javier Díaz.
Pellets frente al gasóleo:La madera prensada hace frente al fuel como combustible de calefacción; compite por la proximidad del recurso y el menor coste, hasta un 33% más barato. El Eren subvenciona el cambio de calderas de biomasa
Calefacción de distrito, proyecto novedoso procedente del norte
El congreso dará a conocer varios proyectos pioneros en el uso de energía alternativa. Así, se citan los sistemas de calefacción de distritos, en los que con una única caldera alimentado con combustible de biomasa se suministra calor y agua caliente a un número determinado de viviendas, En Europa, hay sistemas de este tipo que abastecen hasta 80.000 personas, explicó Javier Díaz, presidente de Avebiom. En el caso de España, la instalación más importante está en Cuéllar (Segovia), donde 200 viviendas, un polideportivo, una piscina y una escuela se nutren de este tipo de calefacción. Los países nórdicos son referente en estas alternativas.
