El deterioro de los fondos de los Padres Paúles espera la financiación del Ayuntamiento para el nuevo de Museo de Ciencas Naturales
LILIANA DEL VALLE .—
Los animales disecados, como esta ave del paraíso, ocupan también un lugar destacado de la colección de piezas
Villafranca del Bierzo volverá a abrir las puertas del Museo de Ciencias Naturales de los Padres Paúles. Tras meses de negociaciones el Ayuntamiento de la villa y la congregación firmarán en breve el convenio de cesión de los fondos que componen este valioso museo cuyo encanto e interés se pondrá nuevamente en valor tras años cerrado al público.
Aunque el museo de los Paúles ha sufrido numerosas vicisitudes a lo largo de su historia que han ido mermando la colección, en la actualidad, aún conserva un interés muy importante que sus propietarios desean sea conocido y disfrutado por todo el mundo. El museo creció, en sus especímenes más curiosos, gracias a la labor de los Padres Paúles misioneros a lo largo del mundo quienes enviaban aves, conchas, minerales o maderas a Villafranca para la colección. Una muestra que en sus inicios se encontraba ubicada en el claustro superior del edificio renacentista de San Nicolás el Real. Al tratarse de un seminario y siendo sus dependencias privadas y visitadas únicamente por los estudiantes, la congregación decidió trasladarlo al claustro inferior de manera que pudiese ser disfrutado por todo el público. Hasta el año 1998 el museo permaneció en el claustro desempeñando la labor pedagógica para la que fue creado pero el arrendamiento a una empresa hotelera de parte del edificio obligó a sus propietarios a trasladar los fondos al antiguo teatro del colegio situado en la parte norte del edificio. Dicho traslado, que no fue realizado por especialistas, supuso un grave deterioro para los fondos a cuyo precario estado se añadió la humedad del nuevo espacio
Aunque el museo de los Paúles ha sufrido numerosas vicisitudes a lo largo de su historia que han ido mermando la colección, en la actualidad, aún conserva un interés muy importante que sus propietarios desean sea conocido y disfrutado por todo el mundo. El museo creció, en sus especímenes más curiosos, gracias a la labor de los Padres Paúles misioneros a lo largo del mundo quienes enviaban aves, conchas, minerales o maderas a Villafranca para la colección. Una muestra que en sus inicios se encontraba ubicada en el claustro superior del edificio renacentista de San Nicolás el Real. Al tratarse de un seminario y siendo sus dependencias privadas y visitadas únicamente por los estudiantes, la congregación decidió trasladarlo al claustro inferior de manera que pudiese ser disfrutado por todo el público. Hasta el año 1998 el museo permaneció en el claustro desempeñando la labor pedagógica para la que fue creado pero el arrendamiento a una empresa hotelera de parte del edificio obligó a sus propietarios a trasladar los fondos al antiguo teatro del colegio situado en la parte norte del edificio. Dicho traslado, que no fue realizado por especialistas, supuso un grave deterioro para los fondos a cuyo precario estado se añadió la humedad del nuevo espacio
Ante la gravedad de la situación y por el riesgo a que Villafranca pudiese perder los cerca de 3.000 fondos que componen el museo, los Padres Paúles han cedido al Ayuntamiento un edificio que deberá ser rehabilitado y acondicionado para que pueda albergar nuevamente el museo. Para llevar a cabo este importante proyecto que incluye además una muestra etnográfica, el consistorio villafranquino espera contar con el apoyo económico de las instituciones y con la ayuda expertos que trabajen en la catalogación y recuperación de los ejemplares entre los que se encuentran 800 aves como grullas, cigüeñas, flamencos, pavos reales, búho real, pelícano, águila real y buitre común y negro. A estos fondos hay que añadir los procedentes de otras partes del mundo como los loros, cacatúas, guacamayos, pirgaro de Ceilán, el calao de Asia o el ave del paraíso de Nueva Guinea. Un total de 600 piezas de corales marinos y conchas se suman a esta importante colección a la que se añaden los fósiles y minerales entre los que se encuentran cuarzos, mármoles, diferentes rocas volcánicas y ejemplares de cobre y azufre entre otros